Exige a la Conselleria medidas eficaces, concretas y menos complacencia con los supuestos logros en la gestión de la pandemia en los centros educativos
Durante el último trimestre del pasado año, ANPE venía exigiendo la planificación de medidas concretas de seguridad ante el pronosticado recrudecimiento de la pandemia, que ahora se cumple, presentando propuestas para salvaguardar las condiciones óptimas de trabajo del profesorado.
En la vuelta a los centros después de las vacaciones, lamentablemente se ha podido corroborar que durante el periodo navideño,la Conselleria no ha planificado nada ni tomado ninguna determinación o medida consecuente con aquel anuncio de recrudecimiento de la pandemia ni con las propuestas de los representantes de los docentes. Más bien al contrario, se ha señalado de nuevo al profesorado, a quien se le pide responsabilidad y cumplir las normas con rigor en la vuelta a las aulas.
Más que ánimos y recomendaciones, lo que esperaba el profesorado en el regreso tras las vacaciones navideñas, eran políticas más concretas para evitar los contagios y hacer frente a la climatología de estos días.
En primer lugar, que la Conselleria hubiera puesto en marcha una campaña de pruebas PCR o de antígenos, como están haciendo algunas CCAA, para garantizar una vuelta segura a las aulas. ANPE ya advirtió de la necesidad de estas pruebas y de la implantación del servicio de enfermería escolar en los centros. Siguen siendo necesarias, como entonces reclamamos, la revisión técnica de los planes de contingencia, muy especialmente de la clasificación de las actividades docentes en los diferentes escenarios de riesgo y la revisión de todos los casos de aquellos que han declarado pertenecer a grupos vulnerables para que se tomarán las medidas oportunas.
En segundo lugar, que la Conselleria hubiera establecido las medidas suficientes y necesarias durante el periodo no lectivo de las navidades para la instalación de equipos de purificación del aire y medidores de CO2. Ante los previsibles cambios climatológicos, ANPE reclamó el pasado trimestre escolar, la urgente e inmediata necesidad de un Plan de Supervisión de ventilación de las aulas que incluyera la participación de personal técnico cualificado en las mediciones de CO2, así como en la determinación de los equipos de purificación a emplear y la ubicación de los mismos. Se anunció entonces la compra de 8000 filtros, cantidad claramente insuficiente, más aun teniendo en cuenta que, de momento, se han recibido sólo 1000 y que su instalación ha sido programada a partir del 11 de enero.
En tercer lugar, que la Conselleria asuma el coste de las mascarillas FFP2 que los docentes están pagando de su bolsillo, para poder ir a trabajar. ANPE advirtió que seguía habiendo centros que no recibían la suficiente asignación económica extraordinaria COVID-19 para hacer frente a los gastos derivados de la adecuación de los centros.
ANPE EXIGE QUE SE RECOMPENSE EL COMPROMISO Y RIGOR DE EQUIPOS DIRECTIVOS Y PROFESORADO EN ESTA GESTIÓN DE LA PANDEMIA CON MEDIDAS QUE GARANTICEN SU SALUD Y SEGURIDAD LABORAL
